Preguntas para tu autoconocimiento

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“A menudo las personas dicen que aún no se han encontrado a sí mismas. Pero el sí mismo no es algo que uno encuentra, sino algo que uno crea”.

Thomas Szasz

Hacer tiempo ya escribí algunos posts sobre el autoconocimiento, por si no los has leído, te los dejo aquí, te recomiendo leerlos antes de seguir con este:

En el post de hoy quiero complementar los posts anteriores proponiendo preguntas, ya sea como reflexiones, usando las preguntas sin más, como preguntas complementarias a las herramientas de los posts anteriores.

Si te pregunto ¿te conoces a ti mismo?  Probablemente estás pensando que ya sabes cuál es tu comida favorita o si eres más diurno que nocturno, o viceversa. En realidad cuando hablamos de autoconocimiento, además de identificar nuestros gustos, vamos unos pasos más allá.

Reflexionar y mirar hacia dentro nos permite conocer sobre nuestras emociones, habilidades, necesidades, fortalezas, debilidades, límites… Es el camino que nos lleva a observarnos, comprendernos y conocernos. En otras palabras: saber quiénes somos.

¿Por qué es necesario desarrollar el autoconocimiento?

Gran parte de nuestro malestar deriva del desconocimiento que tenemos de nosotros mismos. Piensa lo siguiente: ¿Cómo sabrás cuál es el trabajo idóneo para ti si no conoces tus valores, tus habilidades y/o tus necesidades? ¿Qué cosas te enfadan y generan malestar? O, si es el caso, ¿cómo podrás dejar de repetir patrones de relación de pareja poco saludables si ni siquiera eres consciente de ello?

Si no hacemos introspección, fácilmente repercutirá en nuestra toma de decisiones, en nuestros estados emocionales o en la posibilidad de lograr los cambios propuestos. Por tanto, el autoconocimiento es la clave para nuestro bienestar psicológico.

Entre los beneficios de practicar el autoconocimiento, cabe destacar: 

Beneficios del autoconocimiento

Conocernos no es una tarea sencilla, ni siempre resulta agradable. Requiere tiempo y aceptar que probablemente no nos guste todo lo que descubramos, ya sea porque nos angustie o nos avergüence.  Precisamente por esto muchas personas tratan de evitarlo, no obstante, es el camino que nos va a permitir centrarnos en el presente y cambiar y mejorar aquello que nos incomode.

Preguntas para conocernos mejor

Si tienes claro que quieres profundizar y conocerte más a ti mismo, busca un lugar cómodo y sin interrupciones. Preferentemente escríbelo en un papel, para después poder releerlo y/o ir añadiendo más detalles. Se trata de tener un tiempo para ti y para bucear en tu interior.

SOBRE MI

  1. ¿Qué ha hecho que empiece a mirarme hacia adentro?

       2. ¿Cómo me describiría mi mejor amigo?

       3. ¿Qué ha sido lo más importante qué he hecho? ¿Y difícil?

       4. ¿Cuáles son mis mayores fortalezas y debilidades?

       5. ¿En qué capítulos dividiría mi autobiografía?

       6. En cinco años, ¿dónde me gustaría estar?

       7. ¿Qué amo de mí mismo?

       8. ¿Cuál es mi definición de felicidad?

       9. Si pudiera eliminar algo de mi vida, ¿qué sería?

       10. ¿En qué me parezco a mis padres?

EMOCIONES Y PENSAMIENTOS

       11. ¿Cómo me siento ahora mismo?

       12. ¿Cuáles son mis miedos?

       13. ¿Qué me preocupa esta semana?

       14. ¿En qué aspectos me crítico a mí mismo?

       15. ¿Me siento cómodo hablando de mis sentimientos? ¿Con quién?

       16. ¿En qué pienso cuando estoy solo?

       17. ¿Qué me hace sentir orgulloso de mi mismo?

       18. ¿Qué cosas o personas siento que necesito dejar ir?

       19. ¿Cómo gestiono las emociones “negativas” o desagradables?

       20. ¿En qué pienso cuando no puedo dormir?

RELACIONES SOCIALES

       21. ¿Qué aporto a las personas de mi entorno?

       22. ¿Las personas con las que me rodeo me animan o me deprimen?

       23. ¿De qué manera puede influirme la opinión de los demás?

       24. ¿Qué es lo que más me molesta del comportamiento de los demás?

       25. ¿En qué aspectos me comparo con otras personas?

       26. ¿Qué creo que valoran más de mí los demás? ¿Y qué gusta menos?

       27. ¿Qué suelo hacer para que los demás me quieran?

       28. ¿Hay alguien a quien aún no he perdonado?

       29. ¿Cuándo digo “sí” cuando en realidad quiero decir “no”? ¿Por qué?

       30. Si muriera esta noche repentinamente, ¿qué es lo que más lamentaría no haberle dicho a alguien? ¿Por qué no lo he hecho aún?

HABILIDADES, METAS Y LOGROS

       31. ¿Qué me motiva y desmotiva? 

       32. ¿Sobre qué me gustaría aprender más?

       33. ¿Cuáles son mis habilidades o talentos?

       34. ¿Qué hago que no me permite avanzar? ¿Por qué?

       35. ¿Qué trabajo haría gratis?

       36. ¿Cuál es mi mayor sueño o meta?

       37. ¿A qué no dedico tiempo suficiente?

       38. ¿Cuáles son mis horas más productivas del día? ¿Y las que menos?

       39. ¿Cuál es mi mayor logro?

       40. ¿Qué es lo más importante para mí? (trabajo, estudios, familia, amor…). ¿Por qué?

Terminando…

Por supuesto, todo lo anterior son preguntas guía, no tienes por qué hacerte estas, hay muchísimas preguntas más que nos lleven al autoconocimiento, pero quería dejaros unas cuantas que a mí me han funcionado.

En un momento de mi vida, un punto de inflexión, que no sabía qué quería en mi vida, no estaba bien en general, tuve que enfrentarme a este ejercicio, con sus cosas buenas y sus cosas malas, para saber realmente qué quería hacer en mi vida, cómo quería vivir, etc.

El autoconocimiento puede ser una experiencia reveladora para algunos y aterradora para otros, pero es importante plantearse que conocernos a nosotros mismos es el primer paso hacia una vida más plena y con más posibilidades de un buen desarrollo personal. 

La única persona que va a pasar contigo el resto de tu vida eres tú. Eres la única persona que va a presenciar todos tus triunfos, todos tus momentos de aprendizaje, todas tus etapas de crecimiento. Básicamente, deberás convertirte en tu mejor amigo. Pero… ¿crees que te conoces lo suficiente como para serlo?

Te invito a que te tomes un rato e intentes responder a las preguntas anteriores, y, si alguna de esas respuestas te hace ruido o no te agrada demasiado, puedes empezar a desarrollar hábitos que te ayuden a modificar esa respuesta con el tiempo. Sin embargo, debes tener algo claro: no hay respuestas incorrectas. 

Todos estamos en un constante proceso de aprendizaje y crecimiento, lo que respondas hoy no necesariamente será lo mismo que en diez, cinco o, incluso, hasta un año. No te pongas tanta presión, en principio solo responde las preguntas para pasar un buen rato, y si crea en ti algo en lo que reflexionar, hazlo desde el amor y la paciencia hacia ti mismo. 

¡Feliz miércoles!

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